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Puno, 08 de noviembre 2015 – El gobernador regional de Puno, Richard Hancco Soncco, ratificó su postura frente a las críticas y protestas en torno a la construcción del nuevo hospital Manuel Núñez Butrón, y advirtió que quienes se opongan al proyecto serán retirados de las instalaciones de la Dirección Regional de Salud (Diresa).
Durante una entrevista con varios periodistas, Hancco Soncco sostuvo que no permitirá que un grupo reducido de personas obstaculice la ejecución de una obra considerada prioritaria para la región. “Por supuesto que sí. Tenemos que hacer valer la ley. Esto no es propiedad de un dirigente o de un sindicato, es propiedad del Estado, y estamos hablando de la salud de miles de personas”, enfatizó al ser consultado sobre si mantenía sus expresiones previas.
El gobernador cuestionó a los dirigentes que, según dijo, estarían desinformando a los trabajadores. “Nos hemos dado cuenta de que estos señores manejan la información a su conveniencia. Vamos a reunirnos con todos los trabajadores y explicarles detalle a detalle lo que se está haciendo, porque no se les ha contado la verdad”, precisó.
En relación con la designación de funcionarios y profesionales del sector salud, Richard Hancco indicó que “todo caso que involucre posibles irregularidades será investigado”, aunque advirtió que no se debe prejuzgar sin pruebas. “Se tiene que investigar, y si hay decisiones que tomar, se tomarán en su momento”, señaló.
El mandatario regional también criticó al consejero por la provincia de Chucuito, Abad Vizcarra Estrella, quien recientemente se pronunció en contra de las expresiones del gobernador y reiteró su pedido para que el hospital sea construido en Jallihuaya. Hancco Soncco respondió pidiendo “coherencia” a las autoridades. “Si el señor Vizcarra dice estar en contra de la demolición del hospital de Juli, que vaya y lo diga en la plaza de armas de esa provincia. No se puede actuar según la conveniencia política del momento”, manifestó.
Así mismo, informó que técnicos franceses ya se encuentran en Puno para iniciar los estudios de suelo con perforaciones de hasta 60 metros de profundidad en la zona de la avenida El Sol, donde se proyecta la nueva infraestructura hospitalaria.
Finalmente, aseguró que un sector importante de los trabajadores de la Diresa ya ha mostrado disposición para trasladarse temporalmente a otra sede mientras se ejecutan las obras. “Hay un interés colectivo de la región que no puede estar supeditado al interés de unas diez personas. El hospital va porque la población lo necesita”, concluyó Richard Hancco.
