Puno – Los policías, uno con una herida en la ceja y otro con una herida punzocortante a la altura de las costillas (lado izquierdo) habria dañado el pulmón, fueron atendidos en el servicio de emergencia del Hospital Manuel Núñez Butrón de Puno. El incidente, ocurrido aproximadamente a las 7:50 a.m. de esta mañana, involucró un comportamiento agresivo por parte de uno de los agentes del orden.
Según testigos, uno de los policías llegó en un patrullero color plomo con una herida sangrante en la ceja. El segundo policía (vestido con ropa de civil), con una herida punzocortante en la tercera costilla izquierda que aparentemente afectó un pulmón, fue atendido de inmediato, incluso se le colocó una vía intravenosa. Testigos reportan que este policía insultó y agredió verbalmente a otros agentes uniformados, enfermeros y personal médico presentes.
Inicialmente, el policía herido de gravedad solicitó el alta médica sin justificación. Sin embargo, regresó 40 minutos después para completar exámenes pendientes, incluyendo una radiografía. Finalmente, abandonó el hospital a bordo de un patrullero blanco, acompañado de sus colegas, sin completar su atención médica.
El jefe del servicio de emergencia, Joseph Huenece, confirmó la versión de los hechos, incluyendo la agresión verbal del policía al personal de salud. Huenece indicó que el policía, quien estaba de civil, fue atendido por la gravedad de su herida y que se movilizó en silla de ruedas durante su estancia en el hospital. Si bien se desconoce si el policía se llevó la silla de ruedas, se observó que abandonó el hospital en el patrullero de placa EPG-463. Su paradero actual – si fue trasladado a una clínica privada, a la sanidad policial o a otro hospital – es desconocido.
El jefe policial de Puno, General Francisco Ninalaya Martínez, declaró que se está investigando el incidente y que no habrá impunidad para los malos policías. El comportamiento de los agentes involucrados en el incidente también estaría siendo investigado por la inspectoría.