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San Román, 03 de diciembre 2025 – La construcción del proyecto integral de pistas y veredas en las urbanizaciones Tambopata I y San Pedro, ejecutado por la Municipalidad Provincial de San Román y financiado con más de cinco millones de soles del programa Mejorando Mi Barrio, terminó rodeado de serias acusaciones de corrupción que comprometen al regidor Ovidio Edgar Tumi Miranda.
La obra, inaugurada el 20 de noviembre de este año, habría sido escenario de pedidos de dinero a los responsables del consorcio a cargo de su ejecución. Un trabajador del proyecto, cuya identidad se mantiene en reserva, relató que el regidor habría utilizado su función fiscalizadora para solicitar sumas de dinero a cambio de no interferir en el avance de los trabajos.
El denunciante entregó capturas de conversaciones por Whatsapp y comprobantes de transferencias bancarias que, según sostiene, se realizaron a familiares directos del regidor. Entre los documentos figuran depósitos efectuados a una cuenta perteneciente a Adrew Aremi Tumi Panca, identificada como hija del concejal, y otra a nombre de Vercilli Villan Panca Yana, su cuñado. Ambos números de cuenta habrían sido proporcionados por el propio regidor mediante mensajes desde su teléfono móvil.
El empresario confirmó que transfirió dinero siguiendo instrucciones del concejal. Indicó que, pese a realizar los depósitos, las solicitudes continuaron. Aunque negó haber entregado montos elevados, reconoció que los pagos se realizaron en varias oportunidades.
Los primeros movimientos bancarios datan del 12 de febrero. Ese día se concretaron dos transferencias: una por dos mil soles a nombre de la hija del regidor y otra por diez mil soles a la cuenta del cuñado. Las capturas compartidas muestran que los datos fueron enviados desde el celular del fiscalizador municipal.
Meses después, el regidor y otras autoridades presentaron una denuncia penal contra los integrantes del consorcio. Según el trabajador denunciante, esta acción habría sido utilizada como mecanismo de presión ante la negativa de seguir entregando dinero.
El 30 de octubre, un periodista consultó al regidor sobre estas versiones. En ese momento, Tumi Miranda negó todas las acusaciones. Ayer, al ser abordado nuevamente, se le mostraron las pruebas recabadas, pero volvió a rechazar cualquier vínculo con los depósitos y aseguró que no conocía a las personas titulares de las cuentas, pese a que serían su hija, su cuñado y su propia esposa. Minutos después abandonó la entrevista y se dirigió a la sesión de concejo.
Horas más tarde, el empresario que inicialmente confirmó los pagos pidió que la información no se publique, expresando temor a represalias y a quedar marcado en futuros procesos de contratación pública. Sin embargo, debido a la gravedad del caso y la verificación de los documentos, la denuncia tomó carácter público.
El caso será puesto en conocimiento del Ministerio Público para que se inicien las investigaciones correspondientes y se establezcan responsabilidades sobre los hechos que rodearon la ejecución del proyecto.